Según David Livingstone Smith, director del Instituto de Ciencias Cognitivas y Psicología Evolutiva de la Universidad de Nueva Inglaterra, en E.E.U.U, y autor del libro ¿Por qué mentimos?, la mentira es una característica básica del ser humano.
Y afirma: "Mentimos para obtener algún beneficio, poder, status, dinero, sexo. La gente miente en sus currículums para conseguir trabajos, para evitar pagar impuestos, para tener relaciones extra-matrimoniales y los políticos para mantenerse en el poder".
Para este experto, a menudo y lamentablemente, el mentiroso gana en la vida: una persona que no sea capaz de mentir está en desventaja y corre el riesgo de convertirse en un perdedor social.
Quizás esta sea la razón por la cual la mentira es universal, se da en todas las culturas y posiblemente ha existido en las sociedades de todas las épocas. Pero a vveces mentir se transforma en un trastorno patológico, llamado mitomanía, que surgue cuando falsear la realidad se convierte en una necesidad recurrente que condiciona la existencia de la persona al punto de que elpropio mentiroso llega a creer lo que dice. La mitomanía es un síntoma que puede observarse en diversos trastornos psicológicos, pero en especial en aquellos donde prevalecen las compulsiones ya que hay una búsqueda constante y obvsesiva de la mentira.
Suelen ser personas con grandes conflictos internos, un ego débil, autoestima baja y problemas familiares. Suelen arrastrar estos conflictos desde una edad temprana y si no se tratan a tiempo, cuando llegan a la adultez, es muy difícil curarlos. También se observaen algunos adolescentes de personalidad inestable y cuyos padres son excesivamente rígidos o exigentes con ellos.
El mitómano es consciente de sus mentiras, pero no puede deter el impulso de expresarlas con el fin de resultar más atractivo o querido, o para ser aceptado socialmente. Sin embargo, pocas veces alcanza su objetivo y, por el contrario, sus embustes lo llevan a perder toda la credibilidad que, justamente, intenta siempre alcanzar mediante sus engaños.
"Hay formas de supervivencia que incluyen la mentira: por ejemplo, en medios hostiles. La diferencia es que en los mitómanos esto nace espontáneamente. No mienten para sobrevivir sino que es una condición de su existencia; lo hacen en situiaciones difíciles pero también en situaciones que no valen la pena. Es como un vicio"
La mitomanía es una conducta antisocial que obliga a los forenses a un arduo trabajo para diferenciar a los mitómanos que cometen algún delito de pacientes con delirios. La diferencia estriba en que en el delirio el enfermo tiene alterado su jucio y su percepción de la realidad, mientras que el mitómano distingue la realidad de la fantasía y, por lo tanto, es responsable de sus actos.
El mitómano rara vez acude a tratarse por sus propios medios. Cuando lo hace es porque existe una presión familiar o legal que lo obliga a hacerlo.
En consecuencia, poco se puede hacer.
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